El sendero, el yoga y la naturalidad de las cosas

La siguiente fase que vamos a identificar para nuestra evolución como yoguis es el pranayama.
Muchos ya sabréis que el pranayama está relacionado con la energía de la vida que absorbemos, entre otras formas, a través de la respiración y por tanto los ejercicios de respiración son ejercicios relacionados con el prana lo que además justifica, junto con otras muchas cosas, la importancia de la respiración dentro del yoga.
El prana, por tanto, es la esencia de la vida, como el chi chino. Su presencia es la diferencia entre un ser vivo y un ser inerte. Es la energía vital.
El flujo libre de prana por el cuerpo nos hace sentir saludables y llenos de vida.
Las formas de absorber prana son a través de la comida, la bebida y otras, siendo la que mayor prana aporta la respiración, ya que se cree que el aire es uno de los lugares donde más prana hay o de donde con más facilidad lo absorbemos.
Los pranayamas son por tanto técnicas de respiración que ayudan a que circule y se active el prana.
Pranayama significa "dominio de la fuerza vital" y la base de la importancia de estos ejercicios dentro del yoga consiste en que, al igual que el estado mental cambia la respiración, el control consciente de la respiración puede influir en la mente. Es por ello que el pranayama nos puede conducir, no solo a la circulación de la energía vital y colaborar en la evolución de nuestro estado de conciencia, sino también a la paz mental necesaria para el aprovechamiento de nuestras prácticas de yoga, meditación y, en general, de cualquier otra práctica destinada a la elevación de nuestro estado de conciencia.
Ni que decir tiene los beneficios prácticos que en el día a día conlleva este trabajo dado el hecho de poder controlar nuestro estado mental y por tanto nuestras emociones en cualquier situación.
Cuando estamos sincronizados con la energía pránica de nuestro cuerpo, comprendemos mejor la relación entre nuestra individualidad y la universalidad.

Espero que os sea de utilidad.

Namaste.